Rodríguez Saá multó a una peluquería por la empleada tenía el barbijo bajo. Deberán pagar $ 130.000

El Gobernador emprendió su furia contra un comercio en el que sus inspectores detectaron que una trabajadora se había bajado el barbijo para limpiar.

La insólita medida fue notificada en los últimos días a Gustavo Irusta, propietario de la peluquería ubicada en el shopping de la ciudad de San Luis. "En momentos que una trabajadora se bajó el barbijo, no se lo quitó, le tomaron fotos y la grabaron y las usaron como prueba", comentó el coiffeur.

Pese a que desde la Dirección de Defensa al Consumidor del Gobierno le habían asegurado que todo "quedaría en la nada" ante al primer reclamo del peluquero, lo concreto es que la causa avanzó y la sentencia del juez de Ejecuciones Fiscales, Matías Mezzano, está firme.

Frente a una pandemia histórica, con caída de la economía récord y la actividad comercial que pudo trabajar poco y nada durante el último y la ausencia total de políticas públicas que permitan sostenerla, el Gobernador de San Luis persigue a los pequeños empresarios que generan puestos de trabajo.

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