Expertos en geofísica y medición del tiempo estudian si el 9 de julio de 2025 fue el día más corto registrado en el año, debido a una aceleración imperceptible en la rotación del planeta.
La duración de un día no es perfectamente constante: factores naturales pueden hacer que se acorte o se alargue en milisegundos. Según estimaciones preliminares, el 9 de julio habría sido hasta 1,6 milisegundos más corto que las 24 horas estándar.
“Estos microcambios no afectan la vida cotidiana, pero son clave para sistemas de navegación, telecomunicaciones y satélites”, explicó un portavoz del IERS.
Este fenómeno genera nuevas preguntas científicas sobre cómo interactúan los sistemas dinámicos del planeta y si estas alteraciones seguirán siendo más frecuentes en el futuro cercano.