Una tortuga gigante de las Galápagos llamada Diego se acaba de convertir en el nuevo gran héroe de Internet. A sus 100 años consiguió salvar su especie de la extinción teniendo descendencia con todas las tortugas de su isla.
Diego es una Chelonoidis hoodensis, también conocida como tortuga gigante de la Española. Como su nombre indica, la especia solo se encuentra en la Isla Española de las Galápagos. Hace 50 años, en la isla solo quedaban dos machos y una docena de hembras de la especia. Pero, desde entonces, el número se ha multiplicado hasta alcanzar los miles. Y, en gran parte, ha sido gracias al apetito sexual de Diego.
La fama le ha llegado tarde. Hasta de década de los setenta vivía en el anonimato en el Zoo de San Diego. Cuando, en 1976, se dieron cuenta de que pertenecía a una especie que estaba al borde de la extinción, ue transportado de vuelta a las Galápagos para repoblar la isla.
Diego tenía una misión, y ha usado todas las armas de seducción que una tortuga puede tener para cumplirla.
A Diego no hay caparazón que se le resista, donde pone el ojo, pone la bala: Por el momento ha engendrado ya 800 nuevos dieguitos. Eso representa actualmente el 40% de de la población de este tipo de tortugas en la isla. Las cenas de navidad de la familia de Diego tienen que ser un auténtico locurón.