En un llamativo acto la transmisión invisibilizó a los legisladores opositores, pese a que estaban presentes no se los vio salvo una sola vez en un plano abierto que se advirtió la presencia de alguno de ellos.
El Gobernador habló durante una hora y cuarenta y cinco minutos, se refirió a la grave crisis económica y social que heredó el 10 de diciembre. se puso al frente de la lucha contra la droga, dejó certeras definiciones sobre la inimputabilidad de menores, la educación, la salud y hasta la reforma de la Constitución. Temas que hacen al presente y al futuro de la Provincia.
Durante el discurso del mandatario sólo se observaron, en reiteradas oportunidades, a los ministros del Ejecutivo, ministros del Superior Tribunal, legisladores nacionales y sólo legisladores del oficialismo local y sus aliados. En ese contexto, en un acto premeditado, la transmisión oficial omitió deliberadamente mostrar a los legisladores que no comulgan con la actual gestión. Cabe señalar que todos los representantes del pueblo fueron elegidos mediante el voto popular, que los electores merecen ver reflejado a sus legisladores, que la democracia es de todos; ni de opositores ni de oficialistas. Más aún cuando el Gobernador está empeñado en dar un cambio profundo y para siempre.
Las autoridades deberán explicar el por qué de la medida y sus responsables. Situación idéntica se dio durante los discursos de Alberto Rodríguez Saá años atrás, en esos año no existió explicación.