La fiscalía federal de Manhattan anunció este viernes que pedirá la pena de muerte en caso de que Sayfullo Saipov, el yihadista uzbeko acusado de matar a ocho personas el 31 de octubre pasado en Nueva York , sea hallado culpable. Saipov, de 30 años, fue inculpado de 22 cargos por la justicia federal en noviembre último. El atentado del que se lo acusa fue el más mortífero cometido en Nueva York desde los ataques del 11 de septiembre de 2001.
El yihadista fue detenido tras haber lanzado la camioneta que conducía sobre peatones y ciclistas en un lugar sumamente frecuentado del sur de Manhattan. Llegado a Estados Unidos en 2010 gracias a una visa que ganó por un sistema de lotería, Saipov se declaró fiel al grupo Estado Islámico (EI), y "orgulloso" de haber cometido el ataque, según dijeron los investigadores.
Al fundamentar por qué pidió la pena de muerte, el fiscal federal de Manhattan no sólo invocó el número de muertes sino también el hecho que Saipov defienda "la causa del EI". "Uno de cuyos objetivos es matar el mayor número posible de estadounidenses", detalló. En ese sentido, el letrado estadounidense se refirió la "peligrosidad futura" del acusado, que eligió el lugar del atentado para "maximizar" el número de víctimas, y su "ausencia de remordimientos", según un documento presentado el viernes al tribunal. Desde que en noviembre pasado Saipov manifestó su adhesión al EI, el presidente Donald Trump se pronunció, en un tuit, en favor de la pena de muerte. Saipov se declaró no culpable de los cargos que le fueron comunicados.