Desde el peronismo lideran las conversaciones Miguel Angel Pichetto, Juan Schiaretti, Juan Manuel Urtubey y Sergio Massa. Macri a veces también aparece. Los actores entran y salen, pero la agenda se mantiene.
Los peronistas entienden que el problema tiene antes que nada un problema político de falta de claridad para comprender de manera cabal la situación en la que están metidos y los errores que los llevaron a ese lugar. "A vos te hacen el diario de Irigoyen", le dijo Schiaretti a Macri. La reflexión apunta a la Jefatura de Gabinete.
LPO pudo confirmar de fuentes que participan de las negociaciones, algunas de las medidas en discusión:
1- Freno inmediato a la baja de las retenciones y otros tributos.
2- Revisión del acuerdo fiscal del año pasado para que los estados provinciales recuperen capacidad de recaudación.
3- Acuerdo con los gobernadores para diseñar por donde pasará el ajuste que permita llevar el déficit primario al 1,3 por ciento del PBI el año próximo.
4- Trasladar ese acuerdo al Presupuesto y lograr su sanción en ambas cámaras del Congreso.
5- Fin del sistema de subastas de dólares y reemplazo por intervenciones fuertes del Banco Central para frenar la corrida.
Todo esto está en discusión y genera las tensiones previsibles. Dujovne es quien más empuja el freno a la baja de las retenciones y eso le ha traído no pocas tensiones internas. El peronismo y hasta el kirchnerismo, respaldan esa decisión.
El diseño del ajuste es complejo y el gobierno no sabe como implementarlo. Así de sencillo. Oscila entre la inacción y propuestas disparatadas como cortar todos los beneficios a la Patagonia, como reveló en exclusiva LPO. "¿Ustedes saben que soy senador de Río Negro no?", les dijo Pichetto cuando los funcionarios de Macri lanzaron la propuesta. Creían haber encontrado la solución para ahorrarse unos 140 mil millones del piso de 200 mil que hay que recortar.
El ingrediente que complejiza la discusión es la insistencia de la Jefatura de Gabinete por mezclar una agenda de contención del voto. Por eso quieren que el peronismo aparezca como socio del ajuste, mientras reservan a los nuevos ministros Javier Iguacel y Dante Sica, el anuncio exclusivo de medidas que lo atemperan, como créditos subsidiados a las Pyme y la atenuación de los tarifazos.
La indignación que esto genera en un peronismo que ahora sí ve posible ganar las presidenciales del año próximo, es inescribible sin reflejar groserías muy subidas de tono. "A Macri se le terminó el jueguito de hacer populismo adentro y vender libre mercado afuera", es la reflexión más moderada, de uno de los negociadores.
La situación es tan crítica que no admite exageraciones. El gobierno esta vez quedó del lado del costo. El fracaso del gradualismo fue de tal magnitud que desaparecieron los márgenes de maniobra. Se entiende que aceptar esa realidad no es sencillo. Pero cuanto antes ocurra, antes se empezará a transitar la salida.