En la cuenta oficial del candidato los vecinos le recuerdan los pedidos y las promesas que nunca cumplió. Las reuniones en las plazas develaron las mentiras de Rodríguez Saá.
La derrota del 13 de Agosto en las PASO puso varios temas en evidencia, incluso aquellos que eran imposibles de discutir, el primero de todos es que Adolfo, el más popular de los hermanos, puede perder por por 20 puntos. Luego de esa verdad irrefutable se sucedieron una serie de hechos que son parte del manual de estilo de Rodríguez Saá, amenazas, aprietes, dádivas, victimización y una "nueva" forma de campaña, reuniones en plazas con el sello de la vieja política, dar a cambio de votos.
Pero no todo lo que brilla es oro para el candidato del oficialismo, las miles de personas que se le acercan, no por afecto claro está sino para pedirle fundamentalmente trabajo, se encuentran con promesas que nunca fueron cumplidas.
En la cuenta oficial de Adolfo en Facebook se multiplican por miles los mensajes que le recuerdan el incumplimiento de la palabra empeñada. "Señor Adolfo sigo esperando su respuesta y ayuda le dejé varios mensajes incluso por privado y no me lee desde el 25 de setiembre", le reclama Esther Muñoz. A este se le suma el caso de Celeste Chacón, "Hola Adolfo yo mandé nota, me llamaron dos veces del Partido Justicialista pero no me han dado ninguna respuesta". Las intervenciones, pocas, de Adolfo ante los miles de reclamos son para pedir "paciencia" y recordar que son "muchos" los pedidos.
Mientras los sanluiseños que expusieron sus dolencias y problemas ante Rodríguez Saá esperan que este cumpla, Gisela Vartalitis, su esposa, consiguió en tiempo récord un subsidio no reintegrable de $ 80 millones.