A los 70 años el dirigente está dispuesto a someterse a cualquier situación por más ridícula y discriminatoria que parezca y a pesar de que muchas de ellas están muy alejadas de la realidad como comprar tazas en el Zoom.
Pasarán al menos dos años, hasta la próxima elección, para ver a Adolfo Rodríguez Saá recorriendo la provincia y comprando productos de bazar en un comercio céntrico y popular como el Zoom. En su cuenta de Facebook publicó una llamativa imagen en la que se lo observa agachado y cargando "tazones" en un canasto, son para "nuestros queridos Bolivianos", posteó el veterano dirigente.
Seguramente el Senador no conocía "tazones" tan económicos, o al menos no los utiliza, ya que para su boda recibió costosos regalos como una tetera valuada en $ 85 mil y otras excentricidades que su amigos ricos le obsequiaron en para el casamiento celebrado en la mansión de Potrero de los Funes, para recordar simplemente, esa casita en la sierra cuesta apenas $ 75 millones.
Esta imagen, rara, y el comentario despectivo del legislador no fue la única durante el largo fin de semana sanluiseño. Adolfo se subió a una bicicleta en La Pedrera para llamar la atención y mostrarse como uno más. Hasta el 22 octubre los votantes de la provincia nos encontraremos con este tipo de actos reflejados en fotos que no hacen mas que mostrar la desesperada necesidad de sumar votos a un proyecto y a un dirigente en retirada.