El último martes los vecinos daractenses se manifestaron en defensa del hospital que tiene un sinnúmero de problemas para prestar el servicio mínimo de salud, cansados de las promesas incumplidas continuarán con las medidas de protestas.
En las últimas semanas y por un motivo casi inexplicable como la falta de fondos para pagar el sueldo de los enfermeros el nosocomio se quedó sin servicio de enfermería, a lo que se le suma la falta de médicos en áreas sensibles y profesionales de la salud en casi todos los sectores.
A este panorama desolador y preocupante debe sumarse los inconvenientes para el traslado en ambulancia, falta de choferes y averías mecánicas en el único vehículo con el que cuenta el hospital. Como si fuera poco no hay telefonista nombrado para atender las urgencias, por lo que el poco personal debe cuando el trabajo lo permite, atender las llamadas. Hasta el momento la administración de Rodríguez Saá sólo les llevó promesas que no se concretaron.