Una vez más el Museo permanece olvidado, abandonado a su suerte y sin mantenimiento por parte del Gobierno de la Provincia. El lugar que pretendió ser un polo cultural está nuevamente fuera de la agenda de las autoridades.
Hace apenas unos meses atrás, en diciembre de 2021, el Gobierno anunció que estaba trabajando en el mantenimiento del edificio y el predio que contiene obras en la que se destaca el homenaje permanente a Juan Crisóstomo Lafinur. Con la excusa de la pandemia y los impedimentos para preservar el lugar en abril de este año se presentó una exposición colectiva en memoria de Antonio Esteban Agüero, fue la última vez que la luz del esplendor de otros años alumbró el museo. Nuevamente las sombras del olvido tomaron posesión del espacio y las imágenes a las que El Puntano accedió muestran el deterioro, el abandono y la desidia.
Duele ver el maltrato a la historia en el templo que buscó ser el faro de la poesía, del fomento a nuevas expresiones en un lugar tan caro a la historia de la provincia. Las malezas que cubren el predio son una mera muestra del tiempo que pasa sin que nadie pise por ahí, las placas ausentes que ya nada anuncian invitan al olvido, farolas que no iluminan, tachos tirados en un entorno que nada tiene que ver con el objetivo inicial.