El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, dijo que el exministro de Finanzas Patrick Chinamasa ocupará el cargo en el recién creado organismo para atrapar a las "ratas" que usen inapropiadamente el ciberespacio.
Muchos habitantes de la nación africana se han preguntado: ¿cómo repercutirá este nuevo departamento del gobierno en sus libertades civiles (especialmente, en el libre discurso)?
El gobierno de Zimbabue se ha mostrado preocupado en los últimos meses sobre las redes sociales, especialmente después de que el pastor Evan Mawararire, un destacado opositor, ayudara a difundir en internet el movimiento #ThisFlag (Esta bandera).
Usó plataformas como Twitter y Facebook para organizar manifestaciones contra la corrupción y los sobornos a la policía. Fueron las mayores protestas antigubernamentales en la última década en el país. Mawararire fue detenido e imputado por incitar a la violencia.
Pero ¿es ese el motivo detrás de la creación del nuevo ministerio? Según explicó el portavoz de Mugabe, George Charamba, el presidente tuvo la idea de crear el departamento para abordar "una emergente amenaza al Estado fundamentada en el abuso y el comportamiento ilegal".
Charamba dijo que Zimbabue se fijará en cómo otros países -como Rusia, China y Corea del Sur, "enfrentaron retos similares".
"Las redes sociales son, probablemente, la principal plataforma que usan los zimbabuenses para comunicarse y recibir noticias", dice Nyoka. "Y están prosperando pese a las leyes restrictivas que rigen la libertad de expresión".
El gobierno de Zimbabue dice que la nueva legislación no reprimirá la libertad de expresión y protegerá a los ciudadanos frente a nuevas amenazas, como la venganza pornográfica y los ciberataques.