Los futbolistas de élite podrían estar condenados a un futuro borroso. Según un estudio realizado por la University College de Londres y el Hospital Nacional de Neurología y Neurocirugía de Gran Bretaña a algunos futbolistas retirados, los daños cerebrales causados por golpear tanto el balón con la cabeza son una realidad.
En estos análisis, los futbolistas estudiados desarrollaron demencia y otras enfermedades degenerativas. Exactamente, catorce ex jugadores formaron parte de la investigación que empezó hace 40 años: seis de sus cerebros sometidos a examinados después de su muerte tenían signos de Alzheimer.
También se descubrió que cuatro cerebros tenían una patología de encefalopatía traumática crónica (CTE), una consecuencia de repetidos impactos en la cabeza, incluyendo los remates al balón. Estos datos chocan con el estudio previo de 268 cerebros entre la población general británica, donde la tasa de CTE no llegaba ni al 12%.
Los investigadores aún no se atreven a sacar conclusiones sobre los peligros que representa jugar al fútbol, pero esperan que este estudio les de un empujón para otras investigaciones más grandes. Para ello necesitan que más futbolistas se presten a colaborar.
“Nuestras investigaciones muestran que hay una relación entre los golpes repetitivos al cerebro que sufre un jugador de fútbol y el CTE”, asegura la doctora del UCL Institute of Neurology, Helen Ling. “Esto apoyará la necesidad de estudios a mayor escala de un mayor número de futbolistas que necesitan ser seguidos a largo plazo, teniendo en cuenta varios aspectos en términos de sus funciones mentales, imágenes del cerebro y también marcadores que podrían identificar el daño neurológico”.
La Asociación de Fútbol de Inglaterra y el Sindicato de Jugadores no se han quedado al margen y han dejado claro que también están llevando a cabo una investigación independiente respecto a los daños cerebrales. Además, desde el sindicato quieren hacerse cargo de los costes médicos de estos jugadores, aunque por el momento no tienen suficiente dinero.
El subdirector ejecutivo del sindicato, John Bramhall, dijo que el organismo intenta ayudar a los ex jugadores necesitados hasta donde pueden. Sin embargo, el coste de la atención residencial a tiempo completo que necesitan algunos jugadores con demencia avanzada es inasumible.