Norma Calismonte, su esposa durante casi 30 años. pidió la mitad de los bienes en la división. Es la única que no está investigada por la Justicia.
Esta semana se cumplirá un año desde que el empresario K se divorció de Norma Calismonte, su esposa durante casi 30 años. En común acuerdo tomaron la decisión días previos a que el kirchnerismo pierda las elecciones. Poco después, con Cristina Kirchner fuera de la Casa Rosada, comenzó la crisis financiera para el dueño de Austral Construcciones que recibió los últimos doce años U$S 2.200 millones en contratos viales.
En medio de la debacle de su imperio, Báez decidió poner fin al matrimonio con la madre de sus cuatro hijos -investigados por la presunta titularidad de cuentas en Suiza que movieron U$S 25 millones-. Norma es la única que no está investigada y posiblemente el vehículo por el cual la familia logre salvar algunos bienes de una fortuna sospechada de ser construida en base a una maniobra de lavado activos.
Báez y Calismonte habían decidido postergar la división de bienes. El año pasado habían hablado incluso, de armar un fideicomiso que tenga a los cuatro hijos de beneficiarios. En pocos meses todos cambió: el empresario patagónico quedó preso, tiene un embargo de $ 800 millones, 162 propiedades embargadas, cuentas inhibidas y Austral en concurso de acreedores.
En un cambio de planes, la ex esposa de Báez decidió avanzar con lo más delicado de su divorcio: reclamar su 50 %. El fin de semana volvió a visitar al empresario K en Ezeiza y le comentó que iba a pedir que comience a definirse la separación patrimonial. “Él estuvo de acuerdo”, resumieron allegados a Báez.
Calismonte figuró en una sola de las empresas de Báez: una agencia de Turismo a la que se sumó su hijo Martín. De forma conjunta el matrimonio llegó a registrar 77 propiedades en Santa Cruz, pero el número se amplió tras los allanamientos realizados por el fiscal Guillermo Marijuan.
El listado de los bienes reclamados será presentado por Rodríguez Simolai en el Juzgado Civil de Río Gallegos antes del inicio de la feria judicial. “Después del juicio oral y la sentencia hay que ver qué queda de todo lo reclamado, sabemos que es una suma importante”, indicó el abogado a Clarín. Desde el juzgado de Casanello señalaron que al momento de la presentación “va a saltar que la mayoría de los bienes están embargados”. La ex esposa de Báez “busca recuperar lo que se pueda para los nietos”, dijeron desde el entorno familiar.
El primer cálculo de lo oficialmente tasado, más las participaciones accionarias declaradas por Báez ante la Justicia, arroja una suma a favor de Calismonte de $ 701,5 millones. “Aún falta mucho por tasar”, aseguraron fuentes judiciales. Esta cifra podría incrementarse pero si en la Ruta del Dinero K se incautaran los bienes, la ex esposa perdería todo.