En medio de la tensión que guía las negociaciones entre macristas y massistas para ensayar un acuerdo electoral, Francisco de Narváez sorprendió esta tarde al informar que deponía sus aspiraciones de gobernar la provincia de Buenos Aires a través del Frente Renovador. La oportunidad del anuncio radica en que la posibilidad de un entendimiento parecía alejarse al filo de la fecha límite para presentar las alianzas.
"Depende de Sergio Massa y de Mauricio Macri derrotar al kirchnerismo. Y para facilitar ese acuerdo retiro mi candidatura", explicó el legislador de Celeste y Blanco, que tiene mandato hasta 2017. "Llegó la hora de la verdad y creo que lo mejor es dar un paso al costado", agregó.
El dirigente era el claro favorito para quedarse con la interna del Frente Renovador para la gobernación, donde todavía sigue en pie la postulación de Mónica López.
En diálogo con radio Mitre, De Narváez dijo que permanecerá en las filas massistas y que su vocación es la de "la oposición que se quiere unir".