Sin los miles de millones del Gobierno a disposición, Rodríguez Saá demostró que no sabe administrar que como empresario se guarda la plata, echa empleados y no les paga.
Su autodefinió como un gran administrador, un estratega, un lúcido y visionario, ahora que tiene que administrar la empresa Payné sin los suculentos millones del gobierno a libre disposición demostró que es un chanta,m un vago y un usurero. No paga, tira cheques sin fondos y amenaza a proveedores y empleados. Así administra el verdadero Alberto sin la máscara del poder.
Hay un dato que resulta esclarecedor y marca el ritmo político y económico de la empresa, en junio de 2023 cuando se produjo la elección a gobernador Payné tenía, sólo en El Diario de la República, 250 empleados, hoy quedan tan sólo 6.
Los empleados que echó Rodríguez Saá desde que se puso al frente de la firma periodística reclaman por indemnizaciones que nunca pudieron cobrar, sólo recibieron malos tratos y la amenazada de quiebre que los dejaría sin posibilidad de obtener algo.
Así administra El Alberto, lejos del poder, sin rumbo y en caída libre.