Macri apela a Trump, en medio de una dura negociación con el FMI por las reservas. El Central vendió unos USD 358 millones para contener el dólar, pero el FMI no quiere que siga quemando reservas. Lagarde confirmó que no está cerrado el nuevo acuerdo para anticipar desembolsos.
La situación en el mercado es crítica. La presión sobre el peso no se detiene y Caputo apenas consiguió permiso del FMI para seguir quemando reservas por 48 horas. El organismo internacional se pone cada vez más firme en su posición: hay que soltar el dólar hasta que encuentre su punto de equilibrio.
En el mes de agosto, de las arcas del Banco Central se fueron 9.334 millones de dólares -parcialmente compensados con la incorporación de un swap de monedas con China por 4.000 millones de dólares- y en los dos primeros días del mes, el Banco Central ofertó 600 millones de dólares en un infructuoso intento para que el dólar siga subiendo. El lunes fueron 100 millones de dólares y este martes escaló a 500 millones de dólares, de los que le tomaron 358 millones en dos subastas.
Caputo, que pasa por una dura interna con Nicolás Dujovne, se quedó en Buenos Aires para intentar capear la crisis del dólar. Está prácticamente solo en el Central y el Gobierno, paralizado, ni siquiera atina a completar el directorio del organismo monetario.
Macri abrió una negociación directa con Trump para ver si consigue un préstamo directo del Tesoro que le permita ponerle freno a la corrida. En el gobierno no creen que prospere. El republicano basó toda su retórica en la condena a la prodigalidad de los gobiernos que le antecedieron para gastar dólares de los norteamericanos en el exterior. Y en dos meses enfrenta una cruciales elecciones legislativas, que lo tienen al borde de perder la Cámara de Representantes a manos de los demócratas.
Hasta ahora la posición de Trump ha sido respaldar a Macri en las negociaciones que lleva adelante en el FMI, como quedó en evidencia en el comunicado que la Casa Blanca emitió luego de la comunicación telefónica de ambos presidentes (ver comunicado). Pero el board del organismo tiene sus tiempos y sus procesos de control interno. Fuentes al tanto de las negociaciones afirmaron a LPO que la renegociación del acuerdo podría llevar de dos a tres semanas.
En ese sentido, luego de las reuniones con la delegación encabezada por Dujovne, la presidenta del FMI, Christine Lagarde, le puso paño frío al apuro del Gobierno. "El Ministro Dujovne, el Vicepresidente del Banco Central Cañonero y yo nos reunimos hoy para iniciar conversaciones sobre cómo el Fondo puede brindar un mejor apoyo a la Argentina frente a la renovada volatilidad financiera y un entorno económico desafiante", señaló la funcionaria.
"Hemos hecho avances durante nuestra reunión y trabajaremos juntos para fortalecer aún más el programa de las autoridades argentinas respaldado por el FMI. Nuestro diálogo continuará ahora a nivel técnico y, como mencioné antes, nuestro objetivo común es llegar a una conclusión rápida para presentar una propuesta al Directorio Ejecutivo del FMI", concluyó.
De esa manera, Lagarde confirmó que el fallido "anuncio" de Macri de un nuevo entendimiento con el FMI para que adelante todos los fondos comprometidos para el 2019, no estaba cerrado ni lo está.