Un grupo de delincuentes ingresó al Museo del Louvre en París y robó joyas pertenecientes a Napoleón Bonaparte y a la emperatriz Eugenia. Las autoridades confirmaron que el golpe se ejecutó en pocos minutos durante la madrugada del sábado.
El museo cerró sus puertas durante 24 horas para facilitar la investigación. La policía francesa calificó el robo como “altamente planificado” y reveló que los ladrones utilizaron una zona en obras para acceder sin activar las alarmas.
Las joyas formaban parte de la Galerie d’Apollon, una de las salas más emblemáticas del museo. Entre las piezas sustraídas había coronas, collares y medallas de oro con piedras preciosas pertenecientes al período imperial.
El caso generó alarma internacional y obligó al Ministerio de Cultura francés a reforzar la seguridad en todos los museos nacionales. Expertos en patrimonio advierten que las piezas robadas podrían ser imposibles de recuperar.