Alison Calfunao, de 30 años, ingresó el 9 de junio a una clínica privada de Neuquén para realizarse una ligadura de trompas. Durante la intervención sufrió dos paros cardíacos, una infección generalizada y complicaciones que derivaron en la amputación de una pierna y un trasplante de corazón.
Alison fue trasladada a Buenos Aires, donde recibió un trasplante cardíaco y permanece internada. Su madre expresó: “Entró por un procedimiento ambulatorio y terminó con su vida destrozada”.