La histórica victoria del Paris Saint-Germain (PSG) en la final de la Champions League, con un contundente 5-0 sobre el Inter de Milán, desató violentos disturbios en París y otras ciudades de Francia.
Los enfrentamientos ocurrieron principalmente en los Campos Elíseos y alrededores del estadio Parque de los Príncipes, donde se registraron saqueos, vehículos incendiados y ataques a la policía.
"Es insoportable que no sea posible hacer fiesta sin temer el salvajismo de una minoría de matones que no respetan nada", expresó el ministro del Interior, Bruno Retailleau.
El PSG celebrará su título con un desfile por la ciudad y una visita al Palacio del Elíseo, bajo estrictas medidas de seguridad.