Aumentan los casos de cáncer de pulmón, enfermedades cardiovasculares y respiratorias por el aire que respiramos, según el último informe de la OMS.
La contaminación del aire es global. El riesgo que representa para la salud humana existe en casi todos los países del mundo y está al alza. Un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el año pasado acabó prematuramente con la vida de unos siete millones de personas.
«Aunque los países pobres son los más vulnerables, todos estamos amenazados y es inaceptable que más de tres billones de personas, la mayoría de los cuales son mujeres y niños, estén cada día respirando aire contaminado dentro o fuera de sus hogares», declaró el director general de la OMS, el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus.
De acuerdo con la agencia sanitaria de la ONU, nueve de cada diez personas en el mundo respiran aire que contiene altos niveles de contaminación y están expuestos a partículas finas que penetran hasta lo más profundo de los pulmones o del sistema cardiovascular provocando enfermedades cardíacas, cáncer de pulmón, obstrucción pulmonar o infecciones respiratorias crónicas y agudas, entre las que se incluyen la neumonía o el asma.