Este martes la FIFA publicó el "Informe García", una investigación realizada por el Comité de Ética del máximo organismo del fútbol mundial, que detalla cómo fue que varios dirigentes cometieron actos de corrupción ligados, principalmente, a la recepción de sobornos.
El documento desnuda, entre otros temas, cómo Qatar consiguió ser sede del Mundial 2022 a través de sobornos millonarios que pagó a autoridades de la FIFA.
El documento cuenta con 430 páginas y fue difundido por el propio organismo, debido a que parte de él había sido filtrado por el periódico alemán Bild.
El encargado de dirigir la investigación fue el jurista estadounidense Michael García, quien renunció a su cargo como investigador jefe de la Casa Madre cuando el ente se negó a publicar el informe completo en 2014.
Al entregar el documento, señaló la existencia de "problemas serios y de gran envergadura en el proceso de la candidatura y de la atribución" de sedes para los Mundiales de Rusia 2018 y Qatar 2022.
En la investigación aparecen Joseph Blatter, ex presidente de la FIFA, Nicolás Leoz, ex mandamás de la Conmebol, y Julio Humberto Grondona, ex vicepresidente de la Casa Madre del fútbol y presidente del fútbol argentino, entre otros nombres.
Además, el nombre del dirigente fallecido en 2014 aparece en 126 ocasiones y Michael García relata un encuentro que mantuvo con él en el que Grondona mostró poca voluntad para colaborar.
Entre los escándalos revelados en el informe se destaca que tres miembros ejecutivos con derecho a voto volaron en un avión privado de la federación de fútbol qatarí a una fiesta en Río de Janeiro, con todos los gastos pagos, antes de la elección de Qatar como sede del Mundial, y que la más estrecha colaboradora de Joseph Blatter, por entonces presidente del organismo, hizo campaña abiertamente en Qatar para que se concediera un contrato a la constructora de su marido.
Además, gracias al documento, se conoció que un ex miembro usó a su hija de 10 años para cobrar dos millones de dólares.