Fuentes del Gobierno afirmaron a que entre diciembre y enero por primera vez todos los indicadores dieron al alza.
La promesa del segundo semestre se hizo esperar hasta el último mes del año. En agosto habían aparecido algunos brotes verdes como el repunte en el despacho de cemento y el aumento de los permisos de construcción, pero en septiembre los números marcaron un fuerte revés que empeoró en octubre.
“En octubre la caída fue fuerte”. En noviembre la caída se detuvo pero sin repunte: el estimador mensual de actividad económica (EMAE) en octubre marcó una variación del 0,0% respecto de septiembre, es decir que se estabilizó el nivel de actividad, aunque fue 4,7% peor que en igual mes del año anterior. Desde abril cada mes marcaba un desempeño interanual más pobre.
En noviembre y diciembre, aseguran, ya dejó de caer la actividad. De todos modos, con un repunte de la actividad en el último bimestre no va a alcanzar a revertir el signo del año. A lo sumo, podrá acotar la caída del PBI al -2,4%, según las estimaciones oficiales.
"El cuarto trimestre es el momento en el que la economía volvió a crecer", afirmó un importante funcionario involucrado directamente en el manejo económico. Las cifras oficiales se conocerán en las próximas semanas, pero en la Rosada ya tienen los primeros cortes.
Por eso, en el Gobierno se muestran aliviados: en diciembre y por primera vez en el año, según los adelantos de las estadísticas oficiales a las que tienen acceso, todos los indicadores principales de actividad que mira el Gobierno mostraron un alza todos juntos. La coincidencia de los seis índices con signo positivo les da la pauta de que sobre el último minuto del segundo semestre llegó el repunte de la economía.
Por ejemplo, la recaudación en diciembre fue récord en términos generales por el impacto del Blanqueo. Pero incluso si solo se mira la evolución de IVA, se observa el mayor valor de la serie ($54.600 millones) por encima del máximo anterior que se había registrado en septiembre.
A esos seis indicadores hay que sumar el impacto de la mejora del campo que se verá en el ingreso de los recursos de la cosecha del trigo, que todo indica fue excepcionalmente buena.
Respecto del empleo, los datos del Indec son trimestrales y aun no se terminaron de elaborar los números del último trimestre. No obstante, en el tercer trimestre el empleo había subido del 41,7% al 42,1%, una diferencia “estadísticamente no significativa” –advirtieron desde el Indec-; pero acompañado de una baja del 9,3% al 8,5% del desempleo cobró relevancia. Fuentes del Gobierno aseguraron que en el cuarto trimestre las cifras son incluso mejores.
Incluso indicadores con evoluciones muy preocupantes durante el año parecen haberse estabilizado. El estimador mensual industrial (EMI) se clavó en noviembre en la misma cifra de caída interanual de octubre (-4,9%), lo que sugería que, al menos, la actividad fabril había dejado de caer.
FIEL informó que en noviembre la actividad industrial repuntó un 0,6% respecto de octubre, un dato que según el Gobierno ya es tendencia y marca que la caída encontró su piso.
Para FIEL, en noviembre la actividad industrial repuntó 0,6% respecto de octubre, lo que sugiere que en el último trimestre se encontró un piso a la actividad fabril. Y esto involucró también al sector más golpeado del año: el automotriz. El último informe de Adefa reveló que el año cerró con una caída del 10,6%, pero que en noviembre y diciembre se frenaron las bajas.
Otro dato que celebró el Gobierno fue la venta de motos de diciembre. En noviembre, sus ventas habían caído 1,9%, pero con un crecimiento del 24,6% interanual en diciembre, casi salvan el año: 2016 cerró con una caída de solo medio punto porcentual y una expectativa de fuerte crecimiento para 2017.
El otro índice que sigue el Indec es el sintético de la construcción (ISAC). En noviembre había marcado una contracción del 9,4%, lo que indicaba una menor caída que la de octubre (-19,2%), pero sumaba para reducir la caída anual del -13,5% al -13,1%. Según las fuentes oficiales consultadas, en el último mes del año este índice también mostrará una mejora.
Las variables que lo anticipan son mixtas en este sentido: los despachos de cemento portland bajaron 7% en diciembre respecto de noviembre, pero treparon 0,9% respecto de diciembre de 2015. En el Gobierno aseguran que el despacho de asfalto tuvo un fuerte repunte por el despegue de la obra pública. El índice Contruya, que anticipa el ISAC, en función de las ventas de varias industrias mostró en diciembre una suba del 6,3%, lo que no alcanzó a compensar un resultado anual estrepitoso (-15,1%).