En sesión extraordinaria y por unanimidad (49 votos), el Senado convirtió el ley la Emergencia Social que el Gobierno había consensuado con los movimientos sociales y que ya había tenido media sanción en la Cámara de Diputados. Representantes de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), la Confederación de los Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y Barrios de Pie siguieron el debate desde afuera del Congreso y celebraron la aprobación.
La propuesta contempla la declaración de la emergencia social en todo el país, la creación de un Consejo de la Economía Popular y el Salario Social Complementario, e incluye un adicional de $30.000 millones durante tres años para partidas presupuestarias dedicadas a políticas sociales.
Además, aumentará en un 70% los puestos de trabajo en las cooperativas, que actualmente son unos 300.000, y que llegarán a los 510.000. En total, serán 210.000 nuevos trabajos.
Asimismo, se creará el Consejo de la Economía Popular y el Salario Social Complementario (CEPSSC) en la órbita del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, que comenzará a funcionar 90 días después de promulgada la ley. Estará conformado por un representante del Ministerio de Trabajo, uno del Ministerio de Desarrollo Social, uno del Ministerio de Hacienda y tres de las organizaciones sociales.
Juan Manuel Abal Medina, presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, destacó que la iniciativa "impacta fuerte sobre los que más lo necesitan" y recordó que "nació en la calle con la movilización de los trabajadores el día de San Cayetano" para luego ser "construida por el Senado, no en una oficina del Poder Ejecutivo".
Luis Naidenoff (UCR) consideró que la Emergencia Social "es una expresión del arrastre de la crisis" y en ese sentido Jaime Linares opinó que "no es la solución definitiva, pero es un camino sobre la base del consenso" para enfrentar la situación de pobreza que es "reproducida por el sistema".
Pino Solanas la calificó como "el prólogo de una reivindicación frente a las desigualdades groseras de esta sociedad" y expresó: "No solamente es una respuesta a una situación de desigualdad y justicia sino porque viene a reconocer derechos nada menos que a millones de trabajadores informales que estaban absolutamente marginados de toda cobertura social"